En las puertas del infierno
Hoy, el teatro es uno de los lugares más frecuentados para descansar un poco de la rutina. Para hacerle los honores, el sábado pasado presencié la obra Los Otros -estrenada el 2 de julio- en el teatro El Vitral sito en Rodríguez Peña 344, casi esquina Corrientes.
La noche de Buenos Aires estaba repleta de ansiosos espectadores, y El Vitral no se quedó atrás. Al llegar, había gente que esperaba afuera, otras tantas personas sacaban sus entradas –las cuales cuestan $180 por persona, si no se toma la promoción de dos por $300-, y algunos otros hacían la fila correspondiente, expectantes a que abrieran las puertas de las salas. Por otra parte, el teatro invitaba con su pequeño bar y algunas pocas mesas a aquellos que querían tomar algún refresco para pasar la espera.
La obra estrenó el pasado 2 de julio en el teatro El Vitral. (Twitter)
La función comenzó un poco pasadas las 21 –horario estipulado en el que arranca el espectáculo-, en la Sala Néstor Raimondi ubicada en el subsuelo del lugar. Cuando logré sentarme, aún quedaban unos pocos lugares que pronto se fueron ocupando hasta alcanzar una audiencia completa.
Los Otros narra la historia de tres personajes que son condenados al infierno. Allí mismo los recibe Esteban (José Martiré), quien cumple la función de mayordomo del lugar y los conduce hacia un salón Segundo Imperio donde quedarán alojados permanentemente. García (Sebastián Méndez), Inés (Magdalena Iglesias) y Estelle (Mercedes Arguimbau) –ordenados por tiempo de aparición-, comienzan a preguntarse cuál será la condena que les deparará este lugar, ya que el salón no cuenta con elementos de tortura, ni fuego, ni padecimiento físico que bien representan el terrible infierno. A medida que avanza la obra, cada uno descubrirá las distintas razones por las que están allí, juntos, para toda la eternidad.
En cuanto a la puesta en escena, no cuenta con telón, ni con muchos elementos y eso es lo que la hace más interesante. Así y todo, hay un gran trabajo de iluminación que está a cargo de Alejandro Zanga. También, hay una estadía constante de los personajes en escena, a excepción del personaje de José Martiré, que es el único que sale del escenario algunas veces. De esta forma se puede lograr una mayor apreciación de la gran actuación de cada uno de los personajes e introducirse, durante la hora y media de función, en la historia de cada uno de ellos.
Los Otros, una atractiva propuesta de las noches en la calle Corrientes. (Twitter)
La dirección general está a cargo de Marta L. Lecube, el rol de productor general lo cumple José Martiré, y ambos, a su vez, se encargan de la escenografía. El espectáculo está basado en una adaptación de la obra A Puerta Cerrada de J. P. Sartre y, en cuanto a la música, se puede apreciar A Dante Symphony, S 109 – 1. Inferno, de Franz Liszt; Les feuilles mortes, Récital au théâtre de L'étoile; y Saint Louis Blues, de Louis Armstrong. Por otra parte, el vestuario, a cargo de Mercedes Pereyra, se adecúa correctamente a la época –año 1944- y representa muy bien las distintas clases sociales de cada uno de los personajes.
Una vez finalizada la función, el público aplaudió eufórico y los actores salieron a agradecer. Minutos después, se acercaron a abrazar y saludar a familiares y amigos que esperaban en el pequeño hall de entrada del teatro. Aunque ya hayan pasado dos meses, ellos continúan con su función todos los sábados de septiembre a la misma hora para sorprender a aquellos que se quieran dar el lujo –como yo lo hice- de una buena escapada al teatro.
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